Croquetas de queso
Las croquetas para freír en el aire, inspiradas en las croquetas de jamón españolas, tienen un exterior delicioso y crujiente y un centro suave y cremoso, y ni siquiera tienes que sacar la sartén. A todo el mundo le encanta este delicioso aperitivo.
Hace unos años, descubrí un restaurante español situado a una hora de nuestra casa que también servía unas versiones increíbles de estos bocados fritos. Hice varios viajes expresamente para comprarlos.
Esta receta no es tradicional – lleva una base de puré de patata en lugar de salsa bechamel – pero tienen un sabor perfecto y son muy fáciles de hacer con la freidora de aire. Están tan ricas que nunca echarás de menos la versión frita tradicional.
Las croquetas de jamón, en las que se inspiran estas croquetas, son muy populares en los menús de tapas. A menudo se confunde el centro blando y viscoso con queso o puré de patatas, pero en realidad es una salsa de nata muy espesa (bechamel) con jamón ibérico o serrano finamente picado. Son crujientes, saladas y absolutamente deliciosas.
Puré de patatas sobrante. Para obtener los mejores resultados, utilice puré de patatas suave, sin piel y sin sabores demasiado fuertes. Utiliza restos de patatas o compra un bote de puré ya hecho en el supermercado.
¿Cómo evitar que las croquetas se deshagan?
Si se deja demasiado tiempo en la freidora, el relleno se calentará demasiado, se expandirá y hará que las croquetas se partan. Para evitarlo, fríe las croquetas sólo durante tres o cuatro minutos, el tiempo justo para que el exterior quede crujiente y el relleno se caliente.
¿Cómo puedo espesar mis croquetas?
Una forma de espesar una mezcla de croquetas líquida es añadir un poco de pan rallado. Esto absorberá parte del exceso de humedad y ayudará a unir los ingredientes. Otra forma de espesar la mezcla es añadir un poco de harina o maicena.
Croquetas de bacalao
Ingredientes Consejo Pan rallado Nosotros utilizamos pan rallado grueso seco, el pan rallado panko también funciona bien. Si sólo puedes conseguir el pan rallado muy fino, necesitarás un huevo más y el doble de pan rallado para poder repetir el paso del huevo y el pan rallado por segunda vez, para asegurarte de que las croquetas queden bien cubiertas.
Croquetas japonesas
Las croquetas de patata pueden parecer un tater tot casero, pero en realidad son diferentes. Los tater tots se hacen con patatas ralladas, mientras que las croquetas de patata se hacen con puré de patatas. Puedes añadir ingredientes adicionales (queso, bacon, jamón, verduras) tanto a los tater tots como a las croquetas, pero la forma de la patata es diferente en estos dos platos.
Nos encanta un buen queso cheddar fuerte, pero están igual de buenas con gruyere, gouda, un queso ahumado (cheddar, gruyere, provolone) o parmesano. Para una opción vegetariana, omita el bacon o sustitúyalo por jamón, jamón serrano o pollo. Añada a la mezcla verduras cortadas en dados pequeños (que aguanten bien la fritura). Nos gustan los pimientos, el brócoli, las zanahorias, los espárragos o los champiñones.
Para facilitar las cosas (¡o tal vez porque nos da pereza!), mezclamos el queso cortado en dados pequeños directamente con la mezcla de puré de patatas. También funciona formar la croqueta y presionar un cuadrado de queso más grande en el centro de la bola. Asegúrate de que la mezcla de patata cubre completamente el queso. Proceda con el lavado de huevo y el empanado como se indica.
Croquetas cubanas
Combina los brotes con patatas machacadas y una salsa picante para darle un toque delicioso a tu cena de Navidad. Los germinados están repletos de vitamina C, por lo que mantendrán su sistema inmunológico fuerte y protegerán su cuerpo del daño oxidativo causado por el ejercicio. Si se cocinan lo menos posible (menos de ocho minutos), no liberarán los compuestos amargos responsables de sus desagradables aromas.
1 Introduce los brotes en agua hirviendo y escáldalos durante 2-3 minutos. Escurrirlos y refrescarlos con agua fría. Mézclelos con la patata, aplastándolos con un tenedor. Sazonar bien y formar 12 croquetas.
2 Pon el huevo en un bol, la harina en un plato y el pan rallado en otro. Pasa cada croqueta primero por la harina, luego por el huevo y por último por el pan rallado. Asegúrese de cubrirlas por completo. Enfríe en el frigorífico durante 30 minutos o hasta 24 horas.