Introducción
En la liturgia católica, el Tercer Domingo de Adviento es conocido como Gaudete, que significa «alegría» en latín. Es un momento especial dentro de la temporada de Adviento, ya que marca el inicio de una semana de celebración y gozo por la proximidad de la Navidad. Durante esta jornada, se leen diferentes lecturas de la Biblia que invitan a la reflexión y la esperanza en la venida de Jesucristo. En este artículo, nos centraremos en las oraciones correspondientes al Tercer Domingo de Adviento 2023, junto con las lecturas que se proclaman durante la Misa.
Oración Colecta
La Oración Colecta es la oración principal que se recita al inicio de la Misa del Tercer Domingo de Adviento. En esta oración, la comunidad pide a Dios que derrame su gracia sobre nosotros y nos ayude a preparar nuestros corazones para la llegada de su Hijo Jesucristo en Navidad. Es una invitación a la alegría y la esperanza ante la cercanía del Salvador, y a renovar nuestra fe en medio de las dificultades y desafíos de la vida cotidiana.
Lecturas de la Misa
Durante la Misa del Tercer Domingo de Adviento se proclaman diferentes lecturas de la Biblia que nos ayudan a profundizar en el significado de este tiempo litúrgico y a preparar nuestros corazones para la celebración de la Navidad. Entre las lecturas más destacadas para este día se encuentran:
Primera Lectura: Sofonías 3, 14-18a
En esta lectura del profeta Sofonías, se nos invita a regocijarnos y alegrarnos porque el Señor está en medio de nosotros como un poderoso salvador. Nos anima a no temer y a confiar en la bondad y el amor de Dios, que está siempre dispuesto a rescatarnos y a renovar nuestra vida.
Salmo Responsorial: Is 12, 2-3. 4. 5-6
El Salmo Responsorial nos invita a cantar al Señor y a proclamar sus maravillas en todo momento. Es un canto de alabanza y gratitud por la presencia amorosa de Dios en nuestras vidas, que nos llena de alegría y esperanza en medio de las tribulaciones.
Segunda Lectura: Filipenses 4, 4-7
En la carta de San Pablo a los Filipenses, se nos exhorta a alegrarnos siempre en el Señor y a no preocuparnos por nada, sino a presentar nuestras peticiones a Dios con acción de gracias. Nos recuerda que la paz de Dios, que supera todo entendimiento, guardará nuestros corazones y mentes en Cristo Jesús.
Evangelio: Lucas 3, 10-18
En el Evangelio según San Lucas, Juan el Bautista nos llama a la conversión y nos muestra el camino para prepararnos para la venida del Mesías. Nos insta a compartir con los demás, a ser justos y caritativos, y a vivir de acuerdo con la voluntad de Dios. Nos recuerda que el que viene después de él es más poderoso y nos bautizará con Espíritu Santo y fuego.
Oración de los Fieles
En la Oración de los Fieles, la comunidad expresa sus peticiones y súplicas a Dios, pidiendo por las necesidades del mundo, de la Iglesia y de cada uno de los presentes. En este Tercer Domingo de Adviento, las intenciones pueden centrarse en la preparación espiritual para la Navidad, en la esperanza y la alegría que nos trae la llegada de Jesús, y en la conversión y la renovación de nuestras vidas.
Oración Final
La Oración Final es la última oración que se recita al término de la Misa del Tercer Domingo de Adviento. En esta oración, la comunidad agradece a Dios por los dones recibidos durante la celebración y le pide su bendición para la semana que comienza. Es un momento de acción de gracias y de compromiso para vivir los valores del Evangelio en nuestra vida diaria, llevando la luz y la esperanza de Cristo a los demás.
Conclusión
El Tercer Domingo de Adviento es una oportunidad para alegrarnos y regocijarnos en la cercanía de la Navidad, recordando la venida de Jesucristo como Salvador del mundo. A través de las oraciones y las lecturas de la Misa, somos invitados a preparar nuestros corazones, renovar nuestra fe y vivir con esperanza y alegría la llegada del Señor. Que este tiempo de Adviento nos ayude a acoger a Jesús en nuestras vidas y a compartir su amor y su luz con los demás.