Aplicar un tinte rubio puede ser un proceso emocionante para muchas personas que desean un cambio en su apariencia. Sin embargo, uno de los mayores temores al teñirse de rubio es que el color resultante pueda volverse naranja en lugar de un bonito rubio. Este problema puede ocurrir por diversas razones, como la pigmentación natural del cabello, la calidad del tinte utilizado o una aplicación incorrecta. Pero no te preocupes, aquí te daremos algunos tips para aplicar un tinte rubio y evitar que tu cabello termine con tonalidades no deseadas.
Antes de aplicar el tinte
Antes de comenzar con el proceso de tinturado, es importante preparar adecuadamente el cabello para asegurar un resultado óptimo. Empezando por la elección del tinte, es crucial seleccionar un producto de buena calidad y con tonos fríos, ya que estos tonos ayudarán a contrarrestar los matices naranjas no deseados en el cabello. Antes de aplicar el tinte, es recomendable realizar una prueba de sensibilidad en la piel para evitar posibles reacciones alérgicas.
Además, es esencial tener en cuenta el estado actual de tu cabello. Si tu cabello tiene tonalidades anteriores, es importante eliminarlas antes de aplicar el tinte rubio para evitar mezclas de colores no deseadas. En este caso, es recomendable acudir a un profesional para que realice el proceso de decoloración de manera segura y efectiva. Por otro lado, si tienes el cabello muy oscuro, es posible que necesites varias decoloraciones para alcanzar el tono rubio deseado, por lo que es importante ser paciente y cuidar la salud del cabello durante este proceso.
Es fundamental también preparar el cabello adecuadamente antes de aplicar el tinte. Para ello, es recomendable realizar una hidratación profunda unos días antes de la aplicación para asegurar que el cabello esté en óptimas condiciones. Asimismo, es aconsejable no lavar el cabello el día de la aplicación, ya que los aceites naturales del cuero cabelludo ayudarán a protegerlo durante el proceso de tinturado.
Durante la aplicación del tinte
Durante la aplicación del tinte rubio, es importante seguir algunas pautas para asegurar un resultado satisfactorio y evitar tonalidades naranjas no deseadas en el cabello. Primero, es crucial respetar el tiempo de exposición indicado en las instrucciones del tinte. Dejar el producto más tiempo del recomendado puede resultar en un color demasiado claro y amarillento, lo que podría desembocar en tonalidades naranjas.
Otro punto clave durante la aplicación del tinte es asegurarse de distribuir el producto de manera uniforme en todo el cabello. Esto ayudará a que el color se absorba de manera homogénea y evite manchas o áreas con tonalidades diferentes. Para facilitar esta tarea, se recomienda dividir el cabello en secciones y aplicar el tinte de manera ordenada, prestando especial atención a las raíces y a las áreas más difíciles de alcanzar.
Además, es importante tener en cuenta el tono base de tu cabello al aplicar el tinte rubio. Si tu cabello tiene una base muy oscura o rojiza, es posible que el tinte rubio no se adhiera de manera uniforme, lo que podría resultar en tonos naranjas. En estos casos, es recomendable utilizar un producto neutralizador o un tinte con matices cenizos que ayuden a contrarrestar las tonalidades no deseadas y a obtener un rubio más natural y equilibrado.
Después de la aplicación del tinte
Una vez aplicado el tinte rubio, es importante cuidar el cabello para mantener el color y evitar que se vuelva naranja con el tiempo. Para ello, es recomendable utilizar productos específicos para cabellos teñidos, como champús y acondicionadores sin sulfatos que ayuden a prolongar la duración del color y a mantenerlo vibrante. Además, es aconsejable realizar tratamientos de hidratación regularmente para mantener la salud y el brillo del cabello.
Para evitar que el cabello rubio se vuelva naranja, es importante protegerlo de los factores ambientales que pueden alterar el color, como la exposición al sol, el cloro de las piscinas o el agua con altos niveles de minerales. Se recomienda usar protectores solares para el cabello y enjuagar el cabello con agua dulce después de nadar para eliminar posibles residuos de cloro. Asimismo, es aconsejable evitar el uso excesivo de herramientas de calor, como secadores o planchas, que pueden dañar el cabello y alterar el color.
En caso de que el color rubio comience a mostrar tonalidades naranjas con el tiempo, existen productos específicos, como champús morados o tratamientos tonalizantes, que pueden ayudar a neutralizar los matices no deseados y a mantener un rubio más frío y natural. Estos productos suelen contener pigmentos violetas que contrarrestan las tonalidades cálidas del cabello, por lo que es importante utilizarlos de manera regular para mantener el color deseado.
Recuerda que aplicar un tinte rubio en casa puede ser una tarea desafiante, por lo que si tienes dudas o prefieres un resultado profesional, siempre puedes acudir a un salón de belleza para recibir asesoramiento y realizar el proceso de tinturado de manera segura y eficaz. Siguiendo estos tips y cuidando adecuadamente tu cabello, podrás lucir un rubio hermoso y radiante sin miedo a que se vuelva naranja. ¡Anímate a darle un cambio a tu look y disfruta de tu nuevo color de cabello!