El cabello liso y sin volumen es algo con lo que muchas personas luchan a diario. A menudo buscan maneras de darle vida y movimiento a su melena, y una forma muy efectiva de lograrlo es rizándolo. Sin embargo, para quienes tienen el pelo naturalmente liso, lograr rizos duraderos puede ser todo un desafío. En este artículo, te presentaremos algunos consejos y técnicas para rizar el pelo liso de forma efectiva, para que puedas lucir una melena rizada y radiante en todo momento.
Consejos para rizar el pelo liso
Prepara tu cabello antes de rizarlo
Antes de comenzar a rizar tu cabello, es importante que lo prepares adecuadamente. Para ello, lava tu cabello con un champú y acondicionador hidratantes, para asegurarte de que esté limpio y suave. Una vez lavado, aplica un producto protector de calor para evitar dañar tu cabello durante el proceso de rizado. Además, asegúrate de desenredar tu melena con un peine de dientes anchos para evitar nudos y facilitar el proceso de rizado.
Una vez que tu cabello esté limpio y desenredado, sécalo con una toalla y aplica un poco de mousse o espuma para darle volumen y textura. Esto ayudará a que los rizos se mantengan firmes y definidos por más tiempo. También puedes aplicar un poco de crema para peinar o aceite capilar para hidratar tu melena y evitar el frizz. Estos productos ayudarán a que tus rizos luzcan más suaves y brillantes.
Por último, asegúrate de dividir tu cabello en secciones antes de comenzar a rizarlo. Esto facilitará el proceso y te permitirá trabajar de manera más ordenada. Utiliza pinzas o clips para mantener las secciones separadas, y comienza a rizar tu cabello de abajo hacia arriba, para asegurarte de que todos los mechones sean rizados de manera uniforme.
Elige la herramienta de rizado adecuada
A la hora de rizar el pelo liso, es importante elegir la herramienta de rizado adecuada para lograr los mejores resultados. Existen distintas opciones disponibles en el mercado, como las tenacillas, las planchas rizadoras o los rizadores automáticos. Cada una de estas herramientas ofrece distintos tipos de rizos, por lo que es importante que elijas la que mejor se adapte a tus necesidades y preferencias.
Si buscas rizos más definidos y duraderos, las tenacillas son una excelente opción. Puedes elegir entre tenacillas de distintos diámetros, dependiendo del tipo de rizo que desees obtener. Por otro lado, las planchas rizadoras son ideales para crear ondas suaves y naturales, y son muy fáciles de usar. Por último, los rizadores automáticos son una excelente opción si buscas rizos perfectamente uniformes con un solo clic.
Antes de comenzar a rizar tu cabello, asegúrate de ajustar la temperatura de la herramienta de rizado según tu tipo de cabello. Si tienes el pelo fino y delicado, utiliza una temperatura baja para evitar daños, mientras que si tienes el pelo grueso y resistente, puedes optar por una temperatura más alta para lograr rizos más duraderos. Recuerda siempre aplicar un protector de calor antes de rizar tu cabello, para protegerlo de posibles daños.
Técnicas para rizar el pelo liso
Riza tu cabello con tenacillas
Si has optado por utilizar tenacillas para rizar tu cabello liso, sigue estos sencillos pasos para lograr rizos perfectos. Comienza dividiendo tu cabello en secciones y sujetando cada una de ellas con pinzas o clips. Toma un mechón de cabello, enrolla la punta alrededor de la tenacilla y ve enrollando hacia arriba, hasta llegar a la raíz. Mantén la tenacilla en esta posición por unos segundos y luego suelta el mechón. Repite este proceso con el resto de las secciones, asegurándote de rizar todo tu cabello de manera uniforme.
Una vez que hayas rizado todo tu cabello, deja que los rizos se enfríen por completo antes de peinarlos. Puedes ayudar a fijar los rizos aplicando un poco de spray fijador o laca sobre tu melena. Si buscas rizos más sueltos y naturales, puedes pasar los dedos por tu cabello para deshacer los rizos y darle un aspecto más desenfadado. Por último, aplica un poco de serum capilar para darle brillo y suavidad a tu melena rizada.
Crea ondas suaves con una plancha rizadora
Si prefieres crear ondas suaves y naturales en tu cabello liso, una plancha rizadora es la herramienta perfecta para ti. Para lograr este tipo de rizos, toma un mechón de cabello y coloca la plancha rizadora en la raíz. Gira la plancha hacia afuera y deslízala hacia abajo, creando una onda suave en el mechón de cabello. Repite este proceso con el resto de las secciones, asegurándote de rizar todo tu cabello de manera uniforme.
Una vez que hayas rizado todo tu cabello con la plancha rizadora, aplica un poco de spray fijador o laca para asegurarte de que los rizos se mantengan en su lugar. Si deseas rizos más definidos, puedes pasar tus dedos por tu melena para separar los mechones y darle más volumen. Por último, aplica un poco de serum capilar para darle brillo y suavidad a tus ondas suaves y naturales.
Cuidados posteriores al rizado
Protege tus rizos mientras duermes
Para mantener tus rizos intactos durante la noche, es importante protegerlos de posibles daños mientras duermes. Una forma de hacerlo es utilizando una gorra de satén o una funda de almohada de satén, que ayudarán a evitar que los rizos se deshagan o se enreden mientras duermes. También puedes recoger tu melena en una trenza o un moño suelto antes de acostarte, para mantener los rizos en su lugar y evitar que se deshagan.
Por la mañana, puedes refrescar tus rizos aplicando un poco de spray hidratante o agua con aloe vera, para devolverles la forma y el brillo. Si tus rizos se han deshecho durante la noche, puedes retocarlos rápidamente utilizando la herramienta de rizado que prefieras. Recuerda siempre aplicar un poco de serum capilar para proteger tus rizos y mantenerlos suaves y brillantes a lo largo del día.
Hidrata y nutre tus rizos
Después de rizar tu cabello liso, es importante que lo hidrates y nutras adecuadamente para mantenerlo sano y brillante. Puedes utilizar mascarillas capilares hidratantes o acondicionadores sin enjuague para darle a tu melena la hidratación y nutrición que necesita. Aplica estos productos de medios a puntas, evitando las raíces para no sobrecargar tu cabello.
Además, es importante proteger tus rizos del calor y otros agentes externos que puedan dañarlos. Utiliza protector de calor siempre que utilices herramientas de rizado, y evita exponer tu cabello al sol durante largos periodos de tiempo. También puedes optar por utilizar productos con protección UV para proteger tus rizos de los rayos del sol. Recuerda que el cuidado y la hidratación son clave para mantener tus rizos bonitos y saludables a largo plazo.