¿Cómo combatir las manos resecas por el uso del gel desinfectante?
En los últimos meses, con la pandemia del COVID-19, el uso de gel desinfectante se ha vuelto indispensable para mantener nuestras manos libres de virus y bacterias. Sin embargo, el uso constante de este producto puede llevar a que nuestras manos se resequen y agrieten, causando molestias e incomodidades. Por suerte, existen diversas formas de combatir la resequedad y mantener nuestras manos suaves e hidratadas.
¿Por qué el gel desinfectante reseca nuestras manos?
El gel desinfectante contiene alcohol, el cual tiene propiedades desinfectantes pero también puede resecar la piel. El alcohol elimina la capa de aceite que protege nuestra piel, dejándola expuesta a la sequedad y a la irritación. Además, el uso constante del gel desinfectante puede eliminar la flora bacteriana natural de nuestras manos, lo que también contribuye a la resequedad.
Consejos para combatir las manos resecas
Para evitar que nuestras manos se resequen por el uso del gel desinfectante, es importante seguir una serie de consejos:
1. Hidratación constante
La clave para mantener nuestras manos suaves e hidratadas es aplicar una crema hidratante varias veces al día. Es importante elegir una crema que contenga ingredientes como glicerina, vaselina o ácido hialurónico, que son muy efectivos para mantener la piel hidratada. Aplica la crema después de lavarte las manos y cada vez que utilices el gel desinfectante.
2. Uso de guantes de protección
Si es posible, utiliza guantes de protección al momento de utilizar el gel desinfectante. Esto ayudará a proteger tus manos del contacto directo con el alcohol y evitará que se resequen en exceso. Asegúrate de que los guantes sean de un material cómodo y transpirable para evitar la acumulación de humedad.
3. Evitar el agua caliente
El agua caliente puede contribuir a la resequedad de la piel, por lo que es recomendable lavarse las manos con agua tibia o fría. Además, evita utilizar jabones muy fuertes o agresivos, ya que pueden eliminar los aceites naturales de la piel y empeorar la sequedad.
4. Aplicar aceites naturales
Los aceites naturales como el aceite de coco, de almendra o de jojoba son excelentes opciones para hidratar y nutrir la piel. Aplica unas gotas de aceite en tus manos y masajea suavemente hasta que se absorba por completo. Puedes hacerlo antes de dormir para que actúe durante la noche.
5. Exfoliación suave
Realizar una exfoliación suave una vez a la semana puede ayudar a eliminar las células muertas de la piel y promover la renovación celular. Puedes hacerlo mezclando azúcar o sal con un poco de aceite de oliva y masajeando tus manos con movimientos circulares. Luego, enjuaga con agua tibia y aplica crema hidratante.
6. Descanso para tus manos
Si es posible, dale un descanso a tus manos de vez en cuando. Intenta no utilizar el gel desinfectante de forma excesiva y utiliza medidas alternativas como el lavado de manos con agua y jabón cuando sea posible. Esto ayudará a reducir la exposición al alcohol y dará tiempo a que tu piel se recupere.
7. Consulta a un dermatólogo
Si a pesar de seguir estos consejos tus manos continúan resecas e irritadas, es recomendable que consultes a un dermatólogo. Un especialista podrá evaluar el estado de tu piel y recomendarte tratamientos específicos para combatir la resequedad.
Conclusiones
En conclusión, es importante tener en cuenta que el uso constante de gel desinfectante puede resecar nuestras manos, pero con unos simples cuidados y hábitos podemos mantener nuestra piel suave e hidratada. Sigue estos consejos y verás cómo tus manos lucirán mucho mejor a pesar del uso constante del gel desinfectante. ¡Cuida tus manos y mantente protegido!