Receta mágica para preparar un flan de caramelo suave y esponjoso: no lleva horno y listo en 45 minutos
El flan de caramelo es uno de los postres más clásicos y deliciosos de la cocina tradicional. Su sabor dulce y su textura suave lo hacen irresistible para cualquier amante de los postres. En esta ocasión, te presentamos una receta mágica para preparar un flan de caramelo suave y esponjoso, ¡y lo mejor de todo es que no necesitarás horno para hacerlo y estará listo en tan solo 45 minutos!
Ingredientes:
– 1 litro de leche
– 6 huevos
– 200 gramos de azúcar
– 1 cucharadita de esencia de vainilla
– 200 gramos de azúcar para el caramelo
Preparación:
1. Comienza preparando el caramelo: en una sartén a fuego medio, coloca los 200 gramos de azúcar y deja que se derrita lentamente hasta obtener un caramelo dorado.
2. Vierte el caramelo en el fondo de un molde para flan y extiéndelo de manera uniforme. Reserva.
3. En un bol grande, bate los huevos junto con el azúcar hasta que estén bien integrados.
4. Agrega la leche y la esencia de vainilla al bol y continúa batiendo hasta que todos los ingredientes estén bien mezclados.
5. Vierte la mezcla en el molde con el caramelo y tápalo con papel film.
6. Coloca el molde en una olla grande con agua caliente, de manera que el agua llegue hasta la mitad del molde.
7. Tapa la olla y deja cocinar a fuego medio-bajo durante aproximadamente 40 minutos, o hasta que al pinchar el flan con un palillo este salga limpio.
8. Retira el molde del agua y deja que el flan se enfríe a temperatura ambiente.
9. Una vez frío, lleva el flan a la nevera y déjalo reposar durante al menos 2 horas.
Consejos para un flan perfecto:
Utiliza una olla grande para cocinar el flan al baño María
Para que el flan se cocine de manera uniforme y quede con la textura perfecta, es importante utilizar una olla grande con suficiente agua caliente para cocinarlo al baño María. De esta manera, el calor se distribuirá de manera homogénea y evitarás que se queme o se cocine de manera desigual.
No batas la mezcla en exceso
Es importante batir los huevos, el azúcar, la leche y la esencia de vainilla lo justo y necesario para que se integren bien, pero sin excederte en la batida. Si bates la mezcla en exceso, el flan podría quedar demasiado denso o compacto en lugar de suave y esponjoso.
Deja reposar el flan en la nevera antes de desmoldarlo
Para que el flan adquiera la consistencia adecuada y se desmolde de manera perfecta, es importante dejarlo reposar en la nevera durante al menos 2 horas antes de servirlo. De esta forma, el flan se enfriará por completo y tomará la textura suave y esponjosa característica de este delicioso postre.
Variantes y personalizaciones:
Flan de chocolate:
Si eres amante del chocolate, puedes añadir 100 gramos de chocolate negro derretido a la mezcla antes de verterla en el molde. Esto le dará un delicioso sabor a chocolate al flan y lo convertirá en una opción irresistible para los más golosos.
Flan de café:
Para un toque diferente, puedes añadir una cucharada de café soluble a la mezcla antes de verterla en el molde. El sabor a café le dará un toque especial al flan y lo convertirá en el postre perfecto para los amantes de esta bebida.
Flan de almendra:
Si te gusta el sabor de las almendras, puedes añadir una cucharada de extracto de almendra a la mezcla antes de verterla en el molde. El sabor suave y delicado de la almendra le dará un toque gourmet al flan y lo convertirá en una opción sofisticada para cualquier ocasión especial.
Con esta receta mágica para preparar un flan de caramelo suave y esponjoso, podrás disfrutar de un postre delicioso y fácil de hacer en cualquier momento. ¡Anímate a probarla y sorprende a tus invitados con este exquisito flan sin necesidad de horno!