¿Qué es el carcinoma de células basales?

¿Qué es el carcinoma de células basales?

El carcinoma de células basales es un tipo de cáncer de piel que se origina en las células basales de la epidermis, la capa más externa de la piel. Aunque es el tipo de cáncer de piel más común, suele ser menos agresivo que otros tipos, como el carcinoma de células escamosas o el melanoma. Sin embargo, si no se trata a tiempo, el carcinoma de células basales puede provocar daños graves en la piel y en tejidos más profundos.

Este tipo de cáncer suele manifestarse como un bulto o una lesión en la piel, que puede sangrar y no cicatrizar. Por lo general, aparece en áreas expuestas al sol, como la cara, el cuello, los brazos y las piernas. Es importante realizar exámenes regulares de la piel y consultar a un dermatólogo si se detectan cambios en lunares, manchas o lesiones cutáneas.

Síntomas del carcinoma de células basales

Los síntomas del carcinoma de células basales pueden variar de una persona a otra, pero en general incluyen:

1. Bultos o nódulos en la piel:

Estos pueden ser de color rosa, rojo, transparente o marrón y generalmente tienen un aspecto perlado o ceroso.

2. Lesiones que sangran y no cicatrizan:

Las heridas que no sanan por sí solas después de algunas semanas pueden ser un signo de carcinoma de células basales.

3. Lesiones que presentan cambios en la forma o el tamaño:

Si un lunar o una mancha en la piel cambia de tamaño, forma o color, es importante consultar a un médico.

4. Áreas escamosas en la piel:

La piel puede volverse escamosa o presentar costras en el área afectada.

Es importante tener en cuenta que no todos los casos de carcinoma de células basales presentan síntomas. Por esta razón, es fundamental realizar exámenes de la piel de manera regular, especialmente si se tiene antecedentes de exposición al sol o quemaduras solares.

Causas del carcinoma de células basales

Si bien la exposición prolongada al sol es el factor de riesgo más importante para el desarrollo del carcinoma de células basales, también existen otros factores que pueden influir en su aparición. Algunas causas comunes incluyen:

1. Exposición al sol:

La radiación ultravioleta del sol es la principal causa de este tipo de cáncer de piel. La sobreexposición al sol, especialmente sin protección, aumenta el riesgo de desarrollar carcinoma de células basales.

2. Antecedentes familiares:

Las personas con antecedentes familiares de cáncer de piel tienen un mayor riesgo de desarrollar carcinoma de células basales.

3. Edad:

El riesgo de padecer este tipo de cáncer aumenta con la edad, siendo más común en personas mayores de 50 años.

4. Piel clara:

Las personas con piel clara y ojos claros tienen mayor riesgo de desarrollar carcinoma de células basales, ya que tienen menos pigmentación para proteger la piel de los daños solares.

Diagnóstico y tratamiento

Diagnóstico:

El diagnóstico del carcinoma de células basales se realiza mediante una biopsia de la lesión de la piel sospechosa. Durante este procedimiento, se extrae una muestra de tejido de la lesión y se examina bajo un microscopio para determinar si las células son cancerosas.

Tratamiento:

El tratamiento del carcinoma de células basales depende del tamaño, la localización y la extensión del cáncer. Algunas opciones de tratamiento incluyen:

– Cirugía: La extirpación quirúrgica es el tratamiento más común para el carcinoma de células basales. En algunos casos, puede ser necesario realizar cirugía de Mohs, un procedimiento en el que se extirpa el cáncer por capas, para garantizar la eliminación completa de las células cancerosas.

– Terapia fotodinámica: Este tratamiento consiste en aplicar un medicamento fotosensible en la piel y exponer la zona afectada a una luz especial que destruye las células cancerosas.

– Crioterapia: En este procedimiento, se utiliza frío extremo para congelar y destruir las células cancerosas.

– Radioterapia: En casos avanzados, la radioterapia puede ser utilizada para destruir las células cancerosas.

Es importante recordar que el carcinoma de células basales tiene una alta tasa de curación si se detecta y se trata a tiempo. Por esta razón, es fundamental consultar a un médico si se notan cambios en la piel o síntomas sospechosos.

Prevención del carcinoma de células basales

Para reducir el riesgo de desarrollar carcinoma de células basales y otros tipos de cáncer de piel, se recomienda seguir algunas medidas preventivas:

– Limitar la exposición al sol, especialmente entre las 10 de la mañana y las 4 de la tarde, cuando los rayos ultravioleta son más intensos.
– Usar protector solar con un factor de protección solar (FPS) de al menos 30, aplicándolo generosamente y reaplicándolo cada dos horas.
– Cubrir la piel con ropa protectora, sombreros de ala ancha y gafas de sol.
– Evitar las camas de bronceado, que emiten radiación ultravioleta que puede dañar la piel.
– Realizar exámenes regulares de la piel y consultar a un dermatólogo si se detectan cambios en lunares, manchas o lesiones cutáneas.

Siguiendo estas recomendaciones y manteniendo una buena salud cutánea, es posible reducir el riesgo de desarrollar carcinoma de células basales y otros problemas de piel relacionados con la exposición solar. La prevención y la detección temprana son fundamentales para mantener la salud de la piel y prevenir complicaciones graves.

Deja un comentario