¿Qué es la aerofagia?
La aerofagia es un trastorno digestivo que se caracteriza por la acumulación de gases en el estómago y el intestino delgado, provocando molestias como flatulencias, distensión abdominal, eructos frecuentes y sensación de plenitud. Este problema puede ser ocasionado por ingerir aire en exceso al comer o beber, masticar chicle, fumar, hablar mientras se come, entre otros hábitos.
Para tratar la aerofagia, es importante llevar a cabo cambios en la dieta y adoptar hábitos que ayuden a reducir la ingesta de aire. En este artículo te contaremos qué alimentos son recomendables para evitar la aerofagia y qué medidas puedes tomar para reducir las molestias causadas por este trastorno digestivo.
Alimentos que debes evitar si tienes aerofagia
Antes de mencionar qué alimentos son recomendables para evitar la aerofagia, es importante saber cuáles son aquellos que deberías evitar en tu dieta si padeces este trastorno digestivo. Algunos de los alimentos que pueden empeorar los síntomas de la aerofagia son:
Alimentos flatulentos
Los alimentos que producen gases en exceso, como los frijoles, lentejas, brócoli, coliflor, cebolla, pimientos y repollo, entre otros, suelen agravar los síntomas de la aerofagia. Es recomendable limitar su consumo o buscar alternativas que no generen tanta flatulencia.
Bebidas gaseosas
Las bebidas gaseosas, como los refrescos carbonatados, también pueden contribuir a la acumulación de gases en el sistema digestivo. Por lo tanto, es importante reducir o eliminar su consumo si padeces aerofagia.
Chicles y caramelos
Masticar chicle o consumir caramelos de forma frecuente puede aumentar la cantidad de aire que ingieres, lo que puede empeorar los síntomas de la aerofagia. Es recomendable reducir o eliminar su consumo para evitar la acumulación de gases en el estómago.
Alimentos recomendables para prevenir la aerofagia
La elección de alimentos y hábitos alimenticios puede influir en la prevención y reducción de los síntomas de la aerofagia. Incorporar en tu dieta alimentos que ayuden a prevenir la acumulación de gases puede ser de gran ayuda. Algunas opciones recomendables son:
Alimentos ricos en fibra soluble
Los alimentos ricos en fibra soluble, como la avena, las zanahorias, las manzanas, los plátanos y los frijoles, pueden ayudar a prevenir la aerofagia. La fibra soluble facilita la digestión y reduce la formación de gases en el sistema digestivo.
Alimentos bajos en grasa
Los alimentos bajos en grasa, como el pescado, el pollo, las verduras y las frutas, son recomendables para evitar la acumulación de gases en el estómago. Las comidas grasas pueden causar una digestión más lenta, lo que puede conducir a la producción de más gases.
Infusiones y tés relajantes
Algunas infusiones y tés, como la manzanilla, el jengibre, la menta y el hinojo, tienen propiedades relajantes y pueden ayudar a aliviar los síntomas de la aerofagia. Consumir estas bebidas después de las comidas puede contribuir a una mejor digestión.
Hábitos alimenticios recomendables para reducir la aerofagia
Además de elegir los alimentos adecuados, es importante adoptar hábitos alimenticios que contribuyan a reducir la acumulación de gases en el sistema digestivo. Algunas recomendaciones son:
Comer lentamente y masticar bien
Masticar los alimentos de forma adecuada y comer lentamente puede ayudar a reducir la cantidad de aire que ingieres durante las comidas. Esto contribuye a una mejor digestión y previene la acumulación de gases.
Avoid skimping on meals
Evitar saltarse comidas puede ser de ayuda para reducir la aerofagia. Comer porciones más pequeñas con mayor frecuencia a lo largo del día puede favorecer una mejor digestión y reducir la acumulación de gases.
Evitar hablar mientras se come
Hablar mientras se come puede provocar que ingieras más aire de lo normal, lo que puede empeorar los síntomas de la aerofagia. Es recomendable concentrarse en la comida y evitar distracciones durante las comidas.
Conclusión
En resumen, si padeces aerofagia es importante prestar atención a tu dieta y a tus hábitos alimenticios. Evitar alimentos flatulentos, bebidas gaseosas, chicles y caramelos, y optar por alimentos ricos en fibra soluble, bajos en grasa y consumir infusiones y tés relajantes puede ser de gran ayuda para prevenir y reducir los síntomas de la aerofagia. Además, adoptar hábitos alimenticios como comer lentamente, masticar bien, evitar saltarse comidas y no hablar mientras se come puede contribuir a una mejor digestión y reducir la acumulación de gases. Si los síntomas persisten, es importante consultar a un médico para recibir un diagnóstico y un tratamiento adecuado.