El arte del maquillaje ha evolucionado de manera sorprendente a lo largo de los años. Hoy en día, la tendencia es lucir un rostro fresco y natural, lo cual no implica necesariamente no usar maquillaje, sino saber aplicarlo de tal forma que realce la belleza natural sin recargar. Pero, ¿sabías que para conseguir un maquillaje con acabado natural, el secreto está en la preparación de la piel? Sí, así como lo lees. En este artículo te voy a compartir algunos consejos útiles para preparar tu piel y conseguir ese aspecto natural que tanto deseas.
Limpieza e hidratación, la base de todo
El primer paso para una piel lista para el maquillaje es, sin duda, la limpieza. Eliminar las impurezas y el exceso de grasa es fundamental para que el maquillaje se adhiera correctamente. Para ello, puedes usar un limpiador facial suave que se adapte a tu tipo de piel.
Después de la limpieza, es hora de hidratar. La hidratación es un paso que muchas veces se pasa por alto, pero que es esencial para conseguir un acabado natural. Una piel bien hidratada es el lienzo perfecto para el maquillaje. Así que, no escatimes en este paso y elige una crema hidratante de buena calidad que se adecúe a tus necesidades.
Prebase, el secreto para un maquillaje duradero
Una vez que la piel está limpia e hidratada, es recomendable aplicar una prebase o primer. Esta ayuda a que el maquillaje se asiente mejor y dure más tiempo, además de minimizar la apariencia de los poros y las líneas de expresión.
Existen diferentes tipos de prebases, algunas enfocadas en matificar, otras en iluminar, y algunas otras en corregir el tono de la piel. Elige la que mejor se adapte a tu tipo de piel y a tus necesidades.
Elige el maquillaje correcto
Para un acabado natural, es importante que elijas productos de maquillaje que se adapten a tu tono y tipo de piel. Evita las bases muy pesadas o con demasiada cobertura. En lugar de ello, opta por bases ligeras, BB creams o incluso tinted moisturizers.
Recuerda que el objetivo es realzar tu belleza natural, no ocultarla. Por lo tanto, usa el corrector con moderación, solo en las áreas donde realmente lo necesitas.
Aplica con moderación y difumina bien
Un error común al buscar un acabado natural es aplicar demasiado producto. Recuerda que menos es más. Comienza con una pequeña cantidad y ve añadiendo si es necesario.
Además, asegúrate de difuminar bien. No hay nada peor para un acabado natural que las líneas duras o las marcas de maquillaje. Así que, tómate tu tiempo para mezclar bien el producto en tu piel.
Finaliza con un toque de polvo
Para finalizar, puedes aplicar un toque de polvo traslúcido para fijar el maquillaje y eliminar cualquier brillo no deseado. Nuevamente, recuerda hacerlo con moderación para no recargar.
Como ves, preparar la piel para un maquillaje con acabado natural es muy sencillo, solo requiere un poquito de tiempo y los productos adecuados. ¡Anímate a probarlo y luce un rostro fresco y natural todos los días!