El pollo frito más crujiente como de cadena de comida rápida, pero con la calidad de hacerlo en casa

El pollo frito más crujiente, una delicia casera

El pollo frito es uno de los platos más populares en todo el mundo, y es que su sabor crujiente y jugoso lo convierte en una opción irresistible para cualquier ocasión. Aunque suele asociarse con restaurantes de comida rápida, la verdad es que también es posible disfrutar de un delicioso pollo frito en la comodidad de tu hogar. Con la receta adecuada y algunos trucos, puedes lograr un pollo frito tan crujiente y sabroso como el de las cadenas de comida rápida, pero con la garantía de que está hecho con ingredientes frescos y de calidad.

Ingredientes para el pollo frito casero

Para preparar un pollo frito casero de calidad, necesitarás los siguientes ingredientes:

– 1 pollo entero cortado en piezas
– 2 tazas de suero de leche
– 2 tazas de harina de trigo
– 2 cucharaditas de sal
– 1 cucharadita de pimienta
– 1 cucharadita de ajo en polvo
– 1 cucharadita de cebolla en polvo
– 1 cucharadita de paprika
– Aceite para freír

Preparación del pollo frito casero

La clave para lograr un pollo frito crujiente y sabroso está en el proceso de preparación. Sigue estos pasos para obtener los mejores resultados:

1. Marinar el pollo: Coloca las piezas de pollo en un recipiente y cúbrelo con suero de leche. Deja marinar en la nevera durante al menos 4 horas, o idealmente toda la noche. El suero de leche ayudará a que el pollo quede jugoso y tierno.

2. Preparar la mezcla de harina: En un tazón grande, mezcla la harina, la sal, la pimienta, el ajo en polvo, la cebolla en polvo y la paprika. Esta mezcla de especias le dará al pollo un sabor delicioso y aromático.

3. Empanar el pollo: Retira las piezas de pollo del suero de leche y pásalas por la mezcla de harina, asegurándote de que queden bien cubiertas por todos lados.

4. Freír el pollo: Calienta suficiente aceite en una sartén grande o en una freidora hasta alcanzar una temperatura de 180°C. Fríe las piezas de pollo en lotes, asegurándote de no sobrecargar la sartén. Cocina cada lado durante unos 10-12 minutos, o hasta que estén dorados y crujientes.

5. Escurrir y servir: Retira el pollo frito del aceite y colócalo sobre papel absorbente para eliminar el exceso de grasa. Sirve caliente y disfruta de un pollo frito casero y delicioso.

Trucos para un pollo frito perfecto

Además de seguir la receta paso a paso, existen algunos trucos que te ayudarán a conseguir un pollo frito perfecto:

Temperatura del aceite

Es importante que el aceite esté a la temperatura adecuada antes de freír el pollo. Si el aceite está demasiado frío, el pollo absorberá más grasa y quedará aceitoso. Por el contrario, si el aceite está demasiado caliente, el pollo se quemará por fuera antes de cocinarse por dentro. La temperatura ideal es de aproximadamente 180°C.

Doble empanado

Si quieres que tu pollo frito tenga una capa extra crujiente, puedes hacer un doble empanado. Una vez que hayas pasado las piezas de pollo por la mezcla de harina, sumérgelas de nuevo en el suero de leche y luego empanízalas una segunda vez. Esto creará una capa extra crujiente y sabrosa.

Descanso antes de freír

Antes de freír el pollo, deja que las piezas reposen durante unos 15-20 minutos a temperatura ambiente. Esto permitirá que la mezcla de harina se adhiera mejor al pollo y que la capa exterior quede más crujiente.

Alternativas más saludables para el pollo frito

Aunque el pollo frito es delicioso, también es importante considerar opciones más saludables para disfrutar de este plato sin sentirte culpable. Aquí te presentamos algunas alternativas más saludables para el pollo frito:

Pollo al horno

Una opción más saludable que el pollo frito es prepararlo al horno. Puedes empanizar las piezas de pollo con pan rallado integral y hornearlas hasta que estén doradas y crujientes. De esta manera, reducirás la cantidad de grasa y calorías sin renunciar al delicioso sabor del pollo empanizado.

Pollo a la parrilla

Otra alternativa saludable es preparar el pollo a la parrilla. Puedes marinar las piezas de pollo en una mezcla de especias y jugo de limón antes de cocinarlas a la parrilla. Esta técnica de cocción conservará el sabor y la jugosidad del pollo, pero sin la fritura y el exceso de grasa.

Pollo crujiente al horno

Si lo que más te gusta del pollo frito es su textura crujiente, puedes probar a preparar un pollo crujiente al horno. Para ello, empaniza las piezas de pollo con una mezcla de harina de almendras y especias, y hornéalas hasta que estén crujientes por fuera y tiernas por dentro. Esta versión más saludable del pollo frito te permitirá disfrutar de su sabor sin los efectos negativos de la fritura.

Disfruta de un pollo frito casero y delicioso

Con la receta adecuada y algunos trucos en la manga, puedes preparar un pollo frito en casa que rivalice con el de las cadenas de comida rápida en sabor y textura. Ya sea para una cena especial o para una reunión con amigos, el pollo frito casero siempre será una opción ganadora. Además, con las alternativas más saludables que te hemos propuesto, podrás disfrutar de este delicioso plato sin sentirte culpable. Anímate a poner en práctica estos consejos y sorprende a tus seres queridos con un pollo frito casero y delicioso. ¡Buen provecho!