El aceite de orujo de oliva, como podría esperarse del fruto del olivo, es un tesoro de nutrientes y beneficios para la salud. Este subproducto de la producción de aceite de oliva extra virgen, ha sido objeto de investigación y debate en las últimas décadas. Hoy, estoy aquí para hablar de sus beneficios, usos y desmitificar algunos conceptos erróneos que rodean a este aceite.
Beneficios del aceite de orujo de oliva
El aceite de orujo de oliva es muy nutritivo. Contiene antioxidantes, como vitamina E y fitosteroles, que pueden contribuir a la salud general de nuestro organismo. Además, también puede ser una fuente de ácidos grasos monoinsaturados, que son buenos para la salud del corazón. Sin embargo, estos beneficios no son exclusivos del aceite de orujo de oliva, y se pueden encontrar en otros aceites de oliva también.
Un beneficio único del aceite de orujo de oliva es su alto punto de humo. Esto significa que puede calentarse a altas temperaturas sin descomponerse, lo que lo hace ideal para cocinar. Además, su sabor neutro no interfiere con los sabores de los alimentos.
Usos del aceite de orujo de oliva
✔️ Cocinar: Gracias a su alto punto de humo, es perfecto para freír y saltear.
✔️ Aderezos para ensaladas: Su sabor neutro lo hace ideal para mezclar con vinagretas y otros aderezos.
✔️ Cosméticos: Se utiliza en productos para el cuidado de la piel y el cabello por su contenido en antioxidantes.
✔️ Jabón: Es un ingrediente común en la fabricación de jabones.
Mitos sobre el aceite de orujo de oliva
Se ha dicho que el aceite de orujo de oliva no es tan saludable como el aceite de oliva extra virgen. Si bien es cierto que el aceite de oliva extra virgen tiene un perfil nutricional superior, esto no significa que el aceite de orujo de oliva sea malo.
El aceite de orujo de oliva es seguro para el consumo, siempre y cuando se consuma dentro de una dieta equilibrada y saludable. No debemos olvidar que todos los aceites son altos en calorías y deben consumirse con moderación.
Otro mito es que el aceite de orujo de oliva es producido con químicos dañinos. La realidad es que durante la producción del aceite de orujo de oliva, se utilizan sustancias químicas para extraer el aceite restante del orujo, pero estas sustancias son eliminadas durante el proceso de refinado.
En última instancia, el aceite de orujo de oliva es una opción versátil y económica que puede tener un lugar en nuestra cocina y en nuestra vida diaria. Respetar las porciones y mantener una dieta equilibrada es la clave para aprovechar sus beneficios.