Por qué tenés que sumar un primer a tu rutina de maquillaje

¿Qué es un primer y para qué sirve?

Un primer, también conocido como prebase, es un producto cosmético que se aplica antes del maquillaje para preparar la piel y optimizar la duración y apariencia de los productos que se aplicarán posteriormente. Su función principal es crear una base suave y uniforme en la piel, minimizar los poros, matificar la piel, y ayudar a que el maquillaje se adhiera mejor y dure por más tiempo.

Beneficios de incorporar un primer a tu rutina de maquillaje

Incorporar un primer a tu rutina de maquillaje puede aportarte una serie de beneficios que mejorarán la apariencia de tu piel y la duración de tu maquillaje. Algunos de los beneficios más destacados son:

1. Optimiza la duración del maquillaje

Al aplicar un primer antes del maquillaje, estarás creando una capa protectora entre la piel y los productos que se aplicarán, lo que ayudará a que el maquillaje se adhiera mejor y dure por más tiempo, sin desvanecerse ni correrse a lo largo del día.

2. Minimiza la apariencia de los poros

Los primers suelen tener una textura ligera y suave que ayuda a llenar y suavizar los poros, creando una superficie más uniforme y suave en la piel. Esto hace que el maquillaje se aplique de manera más homogénea y que la piel luzca más refinada y poros menos visibles.

3. Controla el brillo y la grasa

Algunas fórmulas de primers están diseñadas para controlar el exceso de brillo y grasa en la piel, lo que ayuda a mantener el rostro mate y con un acabado más suave y duradero a lo largo del día.

Cómo elegir el primer adecuado para tu tipo de piel

Es importante tener en cuenta tu tipo de piel al elegir un primer, ya que existen diferentes fórmulas diseñadas para cubrir las necesidades de cada tipo de piel. Algunos consejos para elegir el primer adecuado son:

1. Piel seca

Si tienes la piel seca, busca un primer hidratante que contenga ingredientes como ácido hialurónico o aceites esenciales para nutrir e hidratar la piel, y evitar que se vea cuarteada o reseca con el maquillaje.

2. Piel grasa

Para la piel grasa, elige un primer matificante que controle el exceso de brillo y grasa en la piel, y evite que el maquillaje se deslice o se desvanezca a lo largo del día.

3. Piel mixta

Si tienes la piel mixta, puedes optar por un primer que combine propiedades hidratantes y matificantes para equilibrar la piel en las zonas más secas y en las más grasas.

Cómo aplicar un primer correctamente

Aplicar un primer correctamente es clave para obtener los mejores resultados de tu maquillaje. Algunos pasos a seguir para aplicar un primer de manera efectiva son:

Paso 1: Limpieza y cuidado de la piel

Antes de aplicar el primer, asegúrate de limpiar y tonificar la piel correctamente para eliminar impurezas y prepararla para recibir el maquillaje.

Paso 2: Aplicación del primer

Aplica una pequeña cantidad de primer en el rostro con las manos limpias o con una brocha específica, y distribúyelo de manera uniforme por toda la piel, prestando especial atención a las zonas con poros dilatados o líneas de expresión.

Paso 3: Tiempo de espera

Deja que el primer se absorba completamente en la piel antes de aplicar el maquillaje, para que los resultados sean óptimos y el maquillaje se adhiera de forma correcta.

Paso 4: Aplicación del maquillaje

Una vez que el primer se haya absorbido, puedes proceder a aplicar tu maquillaje habitual, notando la diferencia en la textura de la piel y la duración del maquillaje.

Conclusión

Incorporar un primer a tu rutina de maquillaje puede marcar la diferencia en la apariencia y duración de tu maquillaje, proporcionando una base suave y uniforme en la piel, minimizando los poros y controlando el brillo. No dudes en probar diferentes fórmulas de primers para encontrar la que mejor se adapte a las necesidades de tu piel, y descubre los beneficios de contar con un aliado indispensable para lucir un maquillaje impecable durante todo el día.

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