¿Qué es la contaminación cruzada?
La contaminación cruzada es la transferencia de microorganismos dañinos de un alimento contaminado a otro alimento limpio a través de diferentes medios, como utensilios, superficies de cocina, manos, entre otros. Esto puede provocar enfermedades transmitidas por los alimentos, como el síndrome de Guillain-Barré, que es una enfermedad rara pero grave que afecta el sistema nervioso.
¿Qué es el síndrome de Guillain-Barré?
El síndrome de Guillain-Barré es un trastorno en el que el sistema inmunitario ataca parte del sistema nervioso periférico. Esto puede provocar debilidad muscular, hormigueo y, en casos graves, parálisis. Aunque la causa exacta del síndrome de Guillain-Barré se desconoce, se ha relacionado con infecciones bacterianas y virales, como la bacteria Campylobacter jejuni, que se puede encontrar en alimentos contaminados.
5 pasos para evitar la contaminación cruzada y prevenir el síndrome de Guillain-Barré
1. Lavar las manos adecuadamente
Una de las formas más comunes en que se produce la contaminación cruzada es a través de las manos. Es fundamental lavarse las manos adecuadamente antes y después de manipular alimentos, especialmente después de tocar alimentos crudos como carne, aves o pescado. El lavado de manos debe durar al menos 20 segundos y asegurarse de frotar entre los dedos y debajo de las uñas.
2. Mantener separados los alimentos crudos y cocidos
Para evitar la contaminación cruzada, es importante mantener separados los alimentos crudos de los cocidos tanto en la nevera como en la cocina. Utiliza tablas de cortar diferentes para alimentos crudos y cocidos, así como utensilios y recipientes. De esta manera, se evita que los jugos de alimentos crudos entren en contacto con los alimentos listos para comer.
3. Cocinar los alimentos a la temperatura adecuada
La cocción adecuada de los alimentos es fundamental para matar cualquier bacteria o microorganismo dañino que pueda estar presente. Utiliza un termómetro de cocina para asegurarte de que los alimentos alcancen la temperatura interna recomendada para su consumo seguro. Por ejemplo, la carne de res debe cocinarse a una temperatura interna de al menos 65°C (150°F).
4. Limpiar y desinfectar superficies de la cocina
Las superficies de la cocina, como encimeras, mesas, utensilios y electrodomésticos, pueden ser un foco de contaminación cruzada si no se limpian adecuadamente. Utiliza desinfectantes apropiados para limpiar estas superficies regularmente, especialmente después de manipular alimentos crudos. También es importante limpiar los trapos de cocina y esponjas con regularidad para evitar la proliferación de bacterias.
5. Almacenar los alimentos correctamente
El almacenamiento adecuado de alimentos es fundamental para prevenir la contaminación cruzada. Guarda los alimentos crudos en recipientes herméticos en la nevera para evitar que los jugos contaminen otros alimentos. Etiqueta y fecha los alimentos para asegurarte de que se consuman antes de que caduquen. Además, evita descongelar alimentos a temperatura ambiente y opta por hacerlo en la nevera o en el microondas.
Otros consejos para prevenir la contaminación cruzada y el síndrome de Guillain-Barré
1. Evitar consumir agua no potable
El agua contaminada con bacterias como Campylobacter jejuni puede ser una fuente de infecciones que aumentan el riesgo de desarrollar el síndrome de Guillain-Barré. Asegúrate de consumir agua potable y hervir o purificar el agua si proviene de fuentes desconocidas o no confiables.
2. Evitar el contacto con excrementos de animales
Las bacterias como Campylobacter jejuni suelen estar presentes en las heces de animales, por lo que es importante evitar el contacto con excrementos de mascotas o animales de granja. Si tienes mascotas, asegúrate de recoger sus desechos de manera adecuada y de lavarte las manos después de manipularlos.
Conclusión
La contaminación cruzada es un problema común en la cocina que puede tener consecuencias graves, como el síndrome de Guillain-Barré. Siguiendo los pasos mencionados anteriormente y teniendo en cuenta los consejos adicionales, puedes reducir significativamente el riesgo de contaminación cruzada y proteger tu salud y la de tu familia. Recuerda siempre seguir buenas prácticas de higiene alimentaria para prevenir enfermedades transmitidas por los alimentos.